Opinión del centro científico Kinesport
Pegatina naranja
Pegatina naranja
Este estudio transversal es un artículo con un riesgo de sesgo moderado. De hecho, no se respetan varios criterios metodológicos importantes: 1) no se calcula el tamaño de la muestra al principio del estudio, lo que impide saber si el número de participantes es suficiente y representativo de la población objetivo, 2) no se describen suficientemente los criterios de inclusión y exclusión, 3) no se utiliza ninguna variable descriptiva para describir las muestras y, por lo tanto, no es posible la comparación de los dos grupos (resistencia y control), 4) no se tienen en cuenta los factores de confusión. En consecuencia, es posible que se hayan introducido sesgos en el diseño del estudio y que se sobreestimen o subestimen los resultados, que por tanto no reflejan la realidad.
Las hormonas esteroides pueden agruparse en dos grandes categorías: los corticoesteroides y los esteroides sexuales. Los corticosteroides, que se dividen en glucocorticoides y mineralocorticoides, intervienen en las respuestas al estrés, la inflamación y el metabolismo de los carbohidratos, mientras que los esteroides sexuales, que se dividen en andrógenos, estrógenos y progestinas, participan en el desarrollo de los caracteres sexuales. En un contexto deportivo, los diferentes niveles de hormonas esteroides circulantes, concretamente la testosterona y los estrógenos, pueden tener un impacto significativo en el rendimiento deportivo de los atletas. Los niveles de testosterona circulante son generalmente aceptados como la base hormonal de las diferencias de género en el rendimiento deportivo, ya que los hombres tienen niveles de testosterona circulante entre 15 y 20 veces más altos que las mujeres. Los atletas con niveles de testosterona circulante más altos de lo normal rinden mucho más que sus homólogas normales. Por el contrario, los estrógenos contribuyen a reducir el rendimiento deportivo y a aumentar el riesgo de sufrir daños importantes en los ligamentos en los atletas, y los niveles circulantes de estradiol, el principal estrógeno en las mujeres, fluctúan a lo largo del mes debido al ciclo menstrual. Se cree que las mujeres premenopáusicas están mejor equipadas que los hombres para participar en deportes de resistencia debido a que utilizan mejor los ácidos grasos. Durante el ejercicio de intensidad baja a moderada, las mujeres suelen obtener más de su gasto energético de los ácidos grasos que sus homólogos masculinos.
Se cree que esta disparidad de género en la utilización de sustratos está relacionada con niveles más altos de estrógenos circulantes en las mujeres y con diferencias en la composición y distribución de la grasa corporal. Hay algunas pruebas científicas que sugieren que los cambios metabólicos inducidos influyen en el rendimiento deportivo de élite. Sólo unos pocos estudios han examinado las diferencias en los perfiles de metabolitos de esteroides entre los atletas de resistencia de élite y los no atletas, especialmente en las mujeres. Para llenar este vacío, este estudio pretende determinar si los atletas de resistencia de élite tienen una firma esteroidea distinta que las diferencia de los no atletas.
Se cree que esta disparidad de género en la utilización de sustratos está relacionada con niveles más altos de estrógenos circulantes en las mujeres y con diferencias en la composición y distribución de la grasa corporal. Hay algunas pruebas científicas que sugieren que los cambios metabólicos inducidos influyen en el rendimiento deportivo de élite. Sólo unos pocos estudios han examinado las diferencias en los perfiles de metabolitos de esteroides entre los atletas de resistencia de élite y los no atletas, especialmente en las mujeres. Para llenar este vacío, este estudio pretende determinar si los atletas de resistencia de élite tienen una firma esteroidea distinta que las diferencia de los no atletas.
Métodos
Este estudio transversal se realizó en atletas de resistencia femeninas seleccionadas en función de su historial deportivo (sólo las que habían competido a nivel nacional y/o internacional) y de su historial de dopaje (sólo las que dieron negativo en las pruebas de sustancias prohibidas). Los datos metabólicos del grupo de control se tomaron de una cohorte del Biobanco de Qatar. El criterio utilizado fue que estuvieran sanos. El estudio se basa en análisis de perfiles metabólicos a partir de muestras de sangre.
El suero se analiza mediante cromatografía líquida de ultra alta resolución, espectrómetro de masas de alta resolución interconectado con una fuente de ionización, electro-nebulización calentada y finalmente un analizador de masas.
El estudio se centró en 29 metabolitos relacionados con la biosíntesis de esteroides. Se utilizó el análisis estadístico para contar sólo los metabolitos que superaban un umbral de ausencia del 50% y para retener los que tenían un efecto discriminatorio en el fenotipo. El período de medición no se indica en este estudio y sólo se realizó una medición en cada muestra.
Resultados y discusión
Los resultados revelaron que 15 metabolitos de esteroides estaban significativamente alterados entre los dos grupos.
Las relaciones bioquímicas de los 15 metabolitos esteroides significativamente asociados (FDR < 0,05) se cotejaron con la base de datos PATHWAY de la Enciclopedia de Genes y Genomas de Kyoto.
14 de ellos estaban en forma sulfatada, lo que los hacía inactivos hasta su desulfuración. Los esteroides de cuatro subvías metabólicas, a saber, los andrógenos, los corticosteroides, la progesterona y la pregnenolona, se identificaron como significativamente alterados entre los dos grupos. Los andrógenos pueden mejorar directamente el rendimiento deportivo a través de sus efectos sobre los patrones de comportamiento, la masa ósea, la masa corporal magra, la eritropoyetina y las capacidades visoespaciales.
Los resultados revelaron que entre los metabolitos androgénicos más modificados se encontraban el monosulfato de 5alfa-androstan-3alfa,17alfa-diol, el monosulfato de androstenediol, el sulfato de androsterona, el 16a-hidroxi DHEA 3-sulfato y el sulfato de epiandrosterona. El monosulfato de 5alfa-androstán-3alfa,17alfa-diol fue el metabolito esteroide con el impacto más significativo en los atletas de resistencia de élite.
En el presente estudio, el cortisol fue uno de los tres metabolitos de esteroides que se alteraron más significativamente entre los atletas de resistencia de élite y las mujeres no atletas. El cortisol es el glucocorticosteroide endógeno más abundante en el ser humano. Interviene en las reacciones inflamatorias y de estrés, así como en la función inmunitaria y en el metabolismo de los hidratos de carbono. Las sesiones de ejercicio prolongadas dan lugar a niveles elevados de cortisol, que a su vez mantienen los niveles de glucosa en sangre al estimular la gluconeogénesis. Además, el entrenamiento de resistencia extrema a largo plazo puede provocar el acortamiento de los telómeros, lo cual puede estar mediado por la sensibilidad al cortisol. Además del estrés inducido por el ejercicio, una posible razón por la que el cortisol era más alto en el presente estudio podría deberse a un patrón de utilización de carbohidratos alterado en los atletas de resistencia de élite. Aunque los niveles de cortisol plasmático, sérico y salival se correlacionan entre sí, los intentos de comparar los niveles de cortisol salival entre atletas y no atletas han producido resultados mixtos. Una revisión sistemática descubrió que sólo unos pocos estudios informaron de niveles elevados de cortisol salival en mujeres atletas, pero no de tales elevaciones en reposo, lo que indica una escasa discriminación entre grupos.
Conclusiones
El entrenamiento de resistencia de forma regular provoca cambios fisiológicos y metabólicos. Los resultados del presente estudio sugieren que los atletas de resistencia de élite tienen un perfil hormonal esteroideo distinto que las distingue de las mujeres no atletas. A pesar de la escasa información sobre los participantes y de los posibles factores de confusión que influyen en su perfil metabólico, los datos obtenidos revelaron diferencias significativas en los niveles de varios metabolitos esteroideos entre los dos grupos de estudio. Es interesante observar que existe una importante falta de estudios en la ciencia del deporte sobre las mujeres atletas. El presente estudio debe considerarse como un estudio exploratorio preliminar al que seguirán estudios de réplica controlados para confirmar nuestros resultados y determinar si los perfiles hormonales esteroideos están relacionados con factores demográficos, de salud y/o de rendimiento deportivo en los atletas de élite.
Artículo de referencia
Tarkhan AH, Anwardeen NR, Sellami M, Donati F, Botrè F, de la Torre X,Elrayess MA.Comparing metabolic profiles between female endurance athletes and non-athletes reveals differences in androgen and corticosteroidlevels. J Steroid Biochem Mol Biol.2022 May;219:106081. doi: 10.1016/j.jsbmb.2022.106081. Epub 2022 Feb 16.PMID:35182726